miércoles, 24 de septiembre de 2008

ESTRATEGIAS DIDÁCTICAS




Innovación en los ambientes de aprendizaje.

Los profesores deben asumir como parte de su perfil las competencias científico-metodológicas y las competencias para planificar, ejecutar y evaluar la tarea docente. El profesor:
· Ha de ser un conocedor de la disciplina que imparte, un especialista en el campo del saber, permanentemente abierto a la investigación y a la actualización del conocimiento.
· Ha de saber también cómo aprenden los alumnos, cuál es la mejor manera de organizar el proceso de enseñanza y de aprendizaje, qué técnicas y estrategias didácticas son las más adecuadas para ese contenido, contexto o nivel educativo, qué formas de actuación motivan el aprendizaje, etc.
· Ha de saber hacer el diseño, desarrollo y evaluación de la práctica propia.

La sociedad actual demanda nuevos roles para el profesor que van más allá de ser la única fuente de información. El profesor debe ejercer el rol de facilitador del aprendizaje individual y en grupos, ser un promotor de valores, ser un especialista en recursos de aprendizaje, un especialista en la convergencia interdisciplinar de saberes; ser un experto en técnicas y estrategias didácticas que faciliten que los alumnos indaguen y construyan el aprendizaje. Un profesor que selecciona y diseña las formas de evaluar el aprendizaje e integra a los alumnos en la evaluación del aprendizaje propio y del compañero.

Técnicas y estrategias didácticas
Con respecto a las técnicas y estrategias didácticas es conveniente que el profesor investigue, seleccione y someta a prueba las más adecuadas de acuerdo con las variables que determinan un ambiente de aprendizaje:
· El estilo docente, cómo ejerce el profesor la dirección y control del aprendizaje.
· Las tareas de aprendizaje y las tareas de enseñanza.
· Las expectativas que exigen más trabajo y de calidad a los estudiantes.
· La cooperación y responsabilidad de los estudiantes en las tareas académicas.
· La aceptación positiva de los estudiantes, afecto y no sarcasmos que inhiben el aprendizaje.
· La estructura establecida con respecto a la forma de aprender y a los valores y actitudes que orientan el comportamiento de los alumnos.

En este curso nos vamos a referir a las técnicas didácticas como conjuntos de conductas del profesor agrupadas para servir a una o más de una función docente, en el entramado de la intercomunicación en el aula. Por ejemplo, en la técnica de exponer: explica, presenta nueva información en forma oral. Y, a las estrategias didácticas como secuencias integradas de procedimientos o actividades que se seleccionan con el propósito de facilitar la adquisición, retención y uso de información o conocimiento.

El uso de una técnica didáctica debe seguir estos pasos:
1. Planeación. El punto de partida es la planeación a detalle de acuerdo con la técnica didáctica seleccionada. Es también crear un modelo de técnica y estrategias didácticas coherente con las variables que determinan un ambiente de aprendizaje.
2. Realización. Consiste en dar a conocer a los estudiantes qué técnica usará, qué van a hacer, cómo lo van a hacer y para qué lo harán.
3. Resultados. Informar a los alumnos lo que aprendió el profesor con el uso de esta técnica didáctica y las respuestas y participación de los alumnos.

Los Modelos de técnicas y estrategias didácticas

No hay un único modelo capaz de hacer frente a todas las variables que conforman un ambiente de aprendizaje, por eso es útil disponer de modelos de enseñanza para poder elegir en el momento adecuado la forma más apropiada de estructurar los procesos de enseñanza y de aprendizaje. Los modelos se concretan en el aula y dependen del contenido, de las metas que se pretendan conseguir, del concepto que se tenga de cómo se aprende y cómo se enseña; pero también depende del contexto en el que tenga lugar la enseñanza.

Los modelos de técnicas y estrategias didácticas deben cumplir con los siguientes criterios:

1. Debe favorecer la comunicabilidad didáctica
2. Favorecer aprendizajes significativos, no memorísticos.
3. Cumplir con las siguientes condiciones:
a) Clarificar el objetivo.
b) Aportar un contexto de enseñanza.
c) Conectar el material con el aprendizaje anterior del alumno.
d) Estructurar jerárquicamente el contenido.
e) Proponer ejemplos
f) Proponer la participación activa en otras tareas.
g) Suscitar un enfoque crítico
h) Comprobar la comprensión de los estudiantes.

Guía para la selección de técnicas didácticas
Para la selección de técnicas didácticas se propone la siguiente guía (Ponce, 2005):

1. ¿La técnica seleccionada es sensible al contexto? ¿Esta técnica proporciona información útil a un grupo de alumnos que aprenden sobre un tema en una clase particular?
2. ¿La técnica es flexible? ¿Pueden los profesores de diferente disciplina adaptar fácilmente la técnica y usarla en otros cursos y contextos?
3. ¿El uso de la técnica cambia la forma en que comprenden los estudiantes? ¿Ayuda a promover entre los estudiantes un mejor aprendizaje?
4. ¿La aplicación de la técnica es positiva tanto para el profesor como para los alumnos? ¿Dará a los estudiantes y profesores el tipo de información que necesitan para hacer cambios en los cursos y correcciones en la enseñanza y en el aprendizaje?
5. ¿Es fácil de preparar y usar? ¿el profesor tiene tiempo para prepararla y luego revisar las respuestas de los alumnos?
6. ¿La técnica permite el uso de tecnología?
7. ¿Es válida en el contexto educativo? ¿Fortalece el aprendizaje de un contenido específico o las habilidades planteadas?

La Técnica de la Exposición Oral y sus estrategias didácticas






Los modelos expositivos se relacionan fundamentalmente con la enseñanza y el aprendizaje de hechos y conceptos, y son útiles cuando se trata de presentar una síntesis de cantidad de información nueva a la que no puede tener acceso fácil el alumno.

A. Características de la técnica de la exposición oral, explicación o presentación.
1. Descripción de la técnica. Consiste en una secuencia de expresiones monologadas, dialogadas o coloquiales de los contenidos de un tema curricular. Esta técnica predomina en buena parte de la docencia universitaria y tiene por tarea comunicativa expresar algo que resulte informativo, relevante y clarificador,
2. Propósito: El profesor pretende transmitir información que se relaciona con conceptos, con procedimientos o con exhortaciones que fomenten cambios deseables en actitudes, conductas y hábitos.
3. Rol del profesor y del alumno. Para que esta técnica funcione, el profesor no sólo se concreta a exponer lo que sabe, sino que se da cuenta de ese saber, cuál es su sentido, qué es lo importante y por qué. El alumno muestra sus preocupaciones y pensamientos acerca de ese conocimiento que se le ofrece.
4. Procedimiento. La exposición oral se puede presentar en tres momentos: Inicio, explicación y cierre.
i. Inicio:
1. Presentar una lista del contenido que se pretende exponer. De esta manera, se prepara el escenario para la presentación de todo lo que sigue.
2. Plantear preguntas para extraer las concepciones previas sobre el tema que se va a explicar.
3. Plantear preguntar para indagar conocimientos previos al tema que se va a explicar, de esta manera aseguramos los “cimientos” sobre los que se va a construir el nuevo conocimiento.
ii. Explicación:
1. Definición de conceptos, qué es y qué no es, comparación con otros conceptos con los que puede confundirse, relación con otros conceptos.
2. Uso de mapas conceptuales.
3. Descripción de características o propiedades del concepto.
4. Presentación de ejemplos y contraejemplos.
5. Uso de analogías, metáforas, comparaciones.
6. Clasificación del concepto, hecho u objeto.
7. Situar el concepto, hecho u objeto en el tiempo y en el espacio.
8. Combinar los procedimientos anteriores.
iii. Cierre:
1. Recapitular en diferentes momentos de la exposición oral.
2. Resumir, sintetizar la información.
3. Verificar el aprendizaje a través de preguntas.
4. Sugerencias para su uso:
5. Formular los objetivos.
6. Organizar los temas principales de la presentación.
7. Presentar el material en forma clara, organizada y en etapas para que los alumnos comprendan la información.
8. Evitar las disgresiones (“irse por las ramas”)
9. Modelar el proceso o ejemplificar de acuerdo con la información que presenta.
10. Acompañar sus explicaciones con dibujos, diagramas, texto escrito en el pizarrón, pósters, carteles, fotografías, postales, ilustraciones periodísticas, casetes, CD´s, DVD, sitios de Internet, etc.
11. Verificar si los alumnos comprendieron los conceptos o procedimientos. Por ejemplo, formular preguntas a los alumnos o bien, pedir a los alumnos que se interroguen entre sí.
12. Hacer un repaso de los puntos de mayor complejidad.
iv. Alternativas de uso:
1. La exposición oral se integra en otras técnicas como el aprendizaje basado en problemas, el Aprendizaje colaborativo, el método de casos.
2. La estrategia Audición-Discusión-Lectura.
a.El profesor explicar a los estudiantes, en forma oral, durante quince minutos los conceptos clave y hechos básicos hallados en las áreas de contenido del libro de texto. Estructura el material de lectura con base en la causa y el efecto: porque, como resultado de o por lo tanto.
b.Los alumnos leen las páginas en las que se basó la explicación, localizan palabras, ideas o hechos que resulten difíciles.
c.Discusión a través de preguntas como ¿Qué es lo que te ha quedado más claro de todo lo que escuchaste y leíste? ¿Qué es lo que menos entendiste de lo que escuchaste o leíste? ¿Qué otras preguntas o ideas les sugirió este tema?



B. Estrategias para exponer / explicar un tema
1. Partir de una anécdota o cuento.
2. Iniciar el tema con la observación del medio que le rodea al alumno.
3. Comenzar la exposición con un juego.
4. Breve lectura del texto o documento por parte del profesor.
5. Introducción a través de un medio audiovisual.
6. Lectura del texto por parte del alumno.
7. Comenzar con una canción o recitación.
8. Presentar una palabra o frase nemotécnica que sirva para la exposición.
9. Comenzar la exposición con la fórmula de “Hoy vamos a hablar del tema…”
10. Diálogo sobre la unidad anterior
11. Presentar los objetivos del tema.
12. Partir de la realización de una ficha.
13. Presentación de datos para que el alumno vaya adivinando el tema que va a tratarse.
14. Diálogo sobre una situación familiar o social.
15. Partir de una experiencia de laboratorio.
16. Exponer gráficamente el esquema del tema que se va a presentar.
17. Aplicar la técnica de lluvia de ideas para que todos los alumnos aporten ideas sobre el tema en cuestión.
18. Comenzar con un Philips 66. En grupos de 6 personas se discute un tema durante 6 minutos y mediante portavoces se dan a conocer las conclusiones al resto del grupo.
19. Un alumno expone.

Otras estrategias didácticas para exponer un tema
1. Llegar a un acuerdo sobre las tareas a realizar.
2. Selección del problema o cuestión sobre lo que se va a trabajar.
3. Escribir qué tareas realizarán los alumnos tan pronto entren al aula.
4. Comenzar con una pregunta abierta para todos.
5. Partir de lo que ya sabemos.
6. Repaso con preguntas y respuestas orales.
7. Lectura, análisis y valoración de un suceso leído en diversas fuentes de información.
8. Pausas para pensar y escribir.
9. Introducción del tema a trabajar.
10. Resumen hecho entre todos.
11. Preguntas para la activación del conocimiento previo.
a. El profesor plantea preguntas sobre datos, conocimientos, dudas sobre un tema: ¿qué sé? ¿qué es lo que no sé? ¿dónde se aplica? ¿qué dudas tengo? ¿qué es lo que me interesa saber? ¿cómo puedo aprender lo que no sé?
12. Uso de mapas conceptuales para explicar el tema y mostrar la organización, jerarquía y dependencia entre los contenidos.
a. Los alumnos pueden lograr una visión amplia y completa de un tema, comprender la relación que existe entre los conceptos de un tema. Para ampliar sus conocimientos en el tema, consulte la lectura “Mapas conceptuales” en el material de apoyo al curso.
b. Los conceptos más inclusores se colocan en los niveles superiores del mapa.
c. Los conceptos menos inclusores se colocan en los niveles subsiguientes.
d. La relación entre conceptos se establece por medio de flechas.
e. Los conceptos se ubican en cuadros o rectángulos.

La Técnica de la Interrogación y sus estrategias didácticas.

A. Características de los modelos de la interrogación
a. Descripción de la técnica. La técnica interrogativa consiste en un intercambio de preguntas y respuestas para conocer los elementos de un objeto, evento, proceso, concepto.
b. Propósito: Para que esta técnica funcione es conveniente que los alumnos aprendan a definir, describir, situar cualquier entidad cognoscible con el uso de las ocho preguntas del saber:
i. ¿Quién?
ii. ¿Qué?
iii. ¿Cuál?
iv. ¿Dónde?
v. ¿Cuándo?
vi. ¿Por qué?
vii. ¿A qué se parece?
viii. ¿Cómo es?
ix. ¿Cómo se hace?
c. Rol del profesor y del alumno. El profesor plantea preguntas de diferente tipo y finalidad, reformula la pregunta en caso necesario y valora la respuesta. El alumno designado por el profesor descodifica la pregunta para entender su significado y formula una respuesta verbal.
d. Procedimiento. La secuencia Interrogación-Respuesta-Evaluación (IRE) es común en la técnica de la interrogación:
i. Interrogación. El profesor puede dirigir sus preguntas al grupo, al equipo, a un alumno. También los alumnos pueden plantear preguntas al profesor, a un equipo o a un compañero.
ii. Respuesta. La respuesta del alumno puede ser de muchos tipos, por ejemplo, un silencio, decir que no sabe, dar una respuesta correcta o incorrecta, coherente o incoherente, completa o incompleta.
iii. Evaluación. La valoración del profesor es imprescindible y puede ser gestual, o verbal; puede ser un elogio, expresar si la respuesta es correcta o incorrecta, hacer un comentario de la respuesta, repetir la respuesta, pedir al alumno que amplíe su respuesta.
e. Sugerencias para su uso:
i. Formular preguntas orales, escritas, icónicas, simbólicas para el aprendizaje de conocimientos, procedimientos y actitudes.
ii. Plantear preguntas con diversas finalidades:
1. Conocer el interés o el nivel de conocimientos.
2. Controlar la atención, la comprensión, el tono verbal adecuado.
3. Aprovechar las respuestas de los alumnos, para resumir, para evaluar, para estimular, para recordar conocimientos.
iii. Plantear preguntas cerradas para ejercitar la memoria, datos hechos, nombres.
iv. Plantear preguntas abiertas, creativas, que exijan la elaboración de respuestas después de combinar varias unidades de conocimiento.
f. Alternativas de uso:
i. El profesor puede aprovechar las respuestas de los alumnos para ampliar o profundizar en el tema con uso de esquemas o mapas conceptuales.

B. Estrategias que pueden integrarse a la técnica de la interrogación

a. El estudio de un tema mediante las ocho preguntas del saber.
b. Ejercitar para responder adecuadamente al desarrollo de habilidades cognitivas como explicar, diferenciar, analizar, clasificar, categorizar, aplicar, inferir, situar un hecho en el tiempo y en el espacio, valorar.
c. Verificar si aprendieron el tema que explicó con anterioridad.
d. Comparar las ideas que los alumnos aportan y encontrar los rasgos comunes y las diferencias.
e. Formular preguntas “en racimo” de tal manera que las respuestas sugieran preguntas y se vayan obteniendo respuestas relacionadas entre sí con respecto al núcleo del contenido.
f. Formular preguntas sobre el tema que los alumnos estudiaron previamente.
g. Estrategias para la activación del conocimiento previo:
i. El profesor plantea preguntas sobre datos, conocimientos, dudas sobre un tema: ¿qué sé? ¿qué es lo que no sé? ¿dónde se aplica? ¿qué dudas tengo? ¿qué es lo que me interesa saber? ¿cómo puedo aprender lo que no sé?

Elementos y características de los mapas conceptuales

Hasta ahora se ha hablado de la utilidad del mapa conceptual y de sus connotaciones teóricas; falta una definición descriptiva que permitía diferenciarlo de otros instrumentos o medios educativos o didácticos. Lo más llamativo a primera vista (también lo más superficial) es de lo que se trata un gráfico, un entramado de líneas que confluye a una serie de puntos. Podríamos relacionarlo con un mapa de carreteras en el que las ciudades o hitos están unidos por una serie de líneas que simbolizan las vías de comunicación. En los mapas conceptuales los puntos de confluencia se reservan para los términos conceptuales que se sitúan en una elipse o un recuadro; los conceptos relacionados se unen por una línea y el sentido de la relación se aclara con palabras-enlace, que se escriben con minúsculas junto a las líneas de unión. Dos conceptos, junto a las palabras-enlace, forman una proposición.




Elementos Fundamentales
Así pues, de acuerdo con la definición de Novak, el mapa conceptual contiene tres elementos fundamentales:

Concepto
Se entiende por concepto una regularidad en los acontecimientos o en los objetos que se designa mediante algún término (Novak, ob, cit., p.22). Los conceptos hacen referencia a acontecimientos que son cualquier cosa que sucede o puede provocarse y a objetos que son cualquier cosa que existe o puede observar. Los conceptos son, según Novak, desde la perspectiva del individuo, las imágenes mentales que provocan en nosotros las palabras o signos con los que expresamos regularidades. Estas imágenes mentales tienen elementos comunes en todos los individuos y matices personales, es decir, nuestros conceptos no son exactamente iguales, aunque usemos las mismas palabras. Los significados son idiosincrático por naturaleza (ob, cit., p.169). Este carácter idiosincrático se explica por la por la forma peculiar de cada uno de captar inicialmente el significado de un término, la experiencia acumulada sobre la realidad a la que alude, los sentimientos que provoca, etc. El término coche, por ejemplo no significa lo mismo para un corredor de fórmula 1 que para un ecologista; por eso, en ocasiones, es tan difícil entenderse.

Hay diferencia entre conceptos e imágenes mentales: éstas tienen un carácter sensorial y aquellos abstracto. En todo caso, puede decirse que los conceptos son imágenes de imágenes según estos autores.

Un número reducido de conceptos se adquiere pronto mediante el descubrimiento. La mayor parte de los significados asignados a las palabras se aprende a través de proposiciones que influyen el nuevo concepto, aunque la ayuda empírica facilite este aprendizaje.

Características
Señalaremos tres características o condiciones propias de los mapas que los diferencian de otros recursos gráficos y de otras estratégicas cognitivas:

Jerarquización
En los mapas conceptuales los conceptos están dispuestos por orden de importancia o de inclusividad. Los conceptos más inclusivos ocupan lugares superiores de la estructura gráfica. Los ejemplos se sitúan en último lugar y como hemos dicho no se enmarcan. Hacemos dos puntualizaciones:
1. En un mapa sólo aparece una vez el mismo concepto.
2. En ocasiones, conviene terminar las líneas de enlace con una flecha para indicar el concepto derivado, cuando ambos están situados a la misma altura o en caso de relaciones cruzadas.

Selección
Los mapas constituyen una síntesis o resumen que contiene lo más importante o significativo de un mensaje, tema o texto. Previamente a la construcción de un mapa hay que elegir los términos que hagan referencia a los conceptos en los que conviene centrar la atención. Como es obvio, si queremos recoger en un mapa un mensaje o texto muy extenso, quedarán excluidos muchos conceptos que podrían recogerse si nos centráramos en una parte de ese mensaje. Existen unas limitaciones de tipo material con las que hay que contar, además del destino o la utilidad que asignemos al mapa. Cuidaremos más la claridad si lo vamos a utilizar como recurso de apoyo en una exposición oral que cuando lo destinemos a nuestro uso particular. De cualquier forma, es preferible realizar mapas con diversos niveles de generalidad. Uno presenta la panorámica global de una materia o tema y otros se centran en partes o subtemas más concretos.

Impacto Visual
Esta característica se apoya en la anterior. En palabras de Novak: “Un buen mapa conceptual es conciso y muestra las relaciones entre las ideas principales de un modo simple y vistoso, aprovechando la notable capacidad humana para la representación visual”.
Se aconseja no dar por definitivo el primer mapa que hayamos trazado, sino tomarlo como borrador y repetirlo para mejorar su presentación.
Algunas sugerencias para mejorar el impacto visual: Se destacan más los términos conceptuales cuando los escribimos con letras mayúsculas y los enmarcamos con elipses. Esta figura es preferible al rectángulo para aumentar el contraste entre letras y de fondo.

Proposición
Consta de dos o más términos conceptuales (conceptos) unidos por palabras (palabras enlace) para formar una unidad semántica. Es la unidad semántica más pequeña que tiene valor de verdad, puesto que se afirma o niega algo de un concepto; va más allá de su denominación.

Palabras-enlace

Son las palabras que sirven para unir los conceptos y señalar el tipo de relación existente entre ambos.

A partir, pues, de la proposición, Novak distingue términos conceptuales (conceptos) o palabras que provocan imágenes mentales y expresan regularidades, y palabras-enlace que sirven para unir dos términos conceptuales y no provocan imágenes mentales. Por ejemplo, en la frase “el perro es mamífero” los dos términos conceptuales, “perro y mamífero”; estarían enlazados con la palabra “es”. Tenemos así una proposición con la que se puede formar el mapa conceptual más simple. Cuando el mapa se complica aparecen distintas ramas o líneas conceptuales y pueden aparecer relaciones cruzadas, es decir, líneas de unión entre conceptos que no están ocupando lugares contiguos sino que se encuentran en líneas o ramas conceptuales diferentes. Los nombres propios, que designan ejemplos de conceptos, son un tercer tipo de términos, que provoca imágenes pero no expresan regularidades sino una singularidad. En los mapas conceptuales estos nombres propios pueden aparecer como ejemplos de conceptos y, como cualquier ejemplo, no deben enmarcarse.

Aunque hemos hablado de los elementos más simples de los mapas conceptuales y de su contenido, esto no basta para identificarlos. Hay que referirse a la vertiente más importante del mapa conceptual, la interna, pues el gráfico sólo es la manifestación de una estructura mental de conceptos y proposiciones. Esta vertiente es la que permite calificar al mapa conceptual como técnica cognitiva y relacionarlo con el aprendizaje significativo.